En medio de crecientes especulaciones sobre la salud y la capacidad mental del ex Presidente Joe Biden, Bill Clinton ha salido en su defensa. En recientes entrevistas, Clinton ha insistido en que, según su experiencia personal, Biden siempre estuvo "en buena forma" y "al tanto de sus asuntos" durante su mandato.
¿Qué dice Clinton sobre la salud de Biden?
Clinton respondió a las preguntas sobre el libro "Original Sin", que alega un encubrimiento por parte de la Casa Blanca sobre el supuesto declive de Biden en el cargo. El ex presidente minimizó las preocupaciones, afirmando que nunca observó ningún signo de deterioro cognitivo en Biden.
"La única preocupación que tenía era si alguien podría hacer ese trabajo hasta los 86 años", dijo Clinton en una entrevista en "CBS Sunday Morning". "Nunca lo vi y me fui pensando que ya no puede hacer esto. Siempre estuvo al tanto de sus informes".
La defensa de Clinton en 'The View'
Anteriormente, en el programa "The View" de ABC, Clinton también expresó su apoyo a Biden, cuestionando la lógica detrás de algunas decisiones tomadas por la Casa Blanca en el período previo al debate de CNN de junio de 2024 entre Biden y Donald Trump. En particular, criticó los viajes internacionales de Biden justo antes del enfrentamiento.
"Tenía 80 años. ¿Qué demonios está haciendo eso?", se preguntó Clinton. "¿Por qué se permitió que eso sucediera?"
A pesar de estas reservas sobre la estrategia de campaña, Clinton mantuvo su postura de que Biden estaba mentalmente agudo durante sus interacciones.
La respuesta de Biden a las acusaciones
El propio Biden ha abordado las acusaciones de declive cognitivo con humor y desafío. En respuesta al libro "Original Sin", bromeó con los periodistas: "Pueden ver que soy mentalmente incompetente, no puedo caminar y puedo vencer a esos dos".
- Clinton defiende la capacidad de Biden.
- Biden bromea sobre las acusaciones de declive.
- El libro "Original Sin" desata la polémica.
La controversia en torno a la salud de Biden continúa siendo un tema de debate público, mientras figuras políticas como Bill Clinton intentan calmar las preocupaciones y defender su legado.