Sergio "Maravilla" Martínez, ex campeón mundial de boxeo, ha generado una nueva controversia al expresar públicamente su apoyo al presidente Javier Milei. Sus declaraciones, realizadas en el podcast Agostini, incluyeron una analogía que ha sido calificada como violenta y desafortunada, comparando a la oposición política con "un marido golpeador".
La polémica analogía de Maravilla
"Los que dicen eso en Argentina tienen el mismo proceder que un marido golpeador. Te aprietan las clavijas por todos lados, te castigan, te golpean, te lastiman, te lapidan, te condenan. Ahora, como reacciones, te dicen: ‘no, nosotros somos puro amor y estás siendo violento’", afirmó Martínez, defendiendo la gestión de Milei y criticando duramente a la oposición, especialmente al peronismo.
El exboxeador argumentó que Argentina ha sufrido "80 años de peronismo" y que es hora de "abrir los ojos" y apoyar un cambio radical. Sus palabras rápidamente se viralizaron, generando tanto adhesión como rechazo en las redes sociales.
Reacción en Redes Sociales y Críticas
La controversia no terminó ahí. Ante las críticas de un usuario en la red social X, Martínez respondió con un insulto, exacerbando aún más la polémica. Esta no es la primera vez que el ex púgil expresa su apoyo a Milei. Ya en el pasado, había elogiado al presidente, afirmando que "vino para romper con todo lo que teníamos antes".
Sin embargo, algunos usuarios recordaron que Martínez también se había reunido con Cristina Fernández de Kirchner en el pasado, generando sorpresa y críticas sobre su postura política actual.
Más allá de las opiniones políticas de Maravilla Martínez, es crucial recordar que la libertad de expresión debe ejercerse con responsabilidad y respeto. Las analogías violentas y los insultos no contribuyen a un debate constructivo y pueden generar más división en la sociedad.
Este incidente pone de manifiesto la polarización política en Argentina y la necesidad de un diálogo más respetuoso entre diferentes sectores. Es importante recordar que el debate de ideas debe ser constructivo y que la violencia verbal no es aceptable.