Fernando Gray, intendente de Esteban Echeverría, emerge como una voz crítica tanto del kirchnerismo como del gobierno de Javier Milei, planteando interrogantes sobre el futuro del peronismo en la actual coyuntura política. Sus declaraciones recientes reflejan una profunda preocupación por la falta de representación de los intendentes y la hegemonía de sectores como La Cámpora y Juan Grabois en las listas de Fuerza Patria, espacio que integra en la provincia de Buenos Aires pero del que se distancia a nivel nacional.
Críticas a Cristina Fernández de Kirchner y Fuerza Patria
Gray cuestiona la conformación de las listas de Fuerza Patria, argumentando que están desvinculadas de las bases peronistas y los intereses de los municipios. Esta crítica se suma a las ya existentes sobre la judicialización de la política y el supuesto lawfare contra figuras como Cristina Fernández de Kirchner, donde se señalan la falta de imparcialidad judicial y la exposición mediática parcial de los casos. Si bien Gray no se pronuncia directamente sobre estas acusaciones, su descontento con la dirección que ha tomado el espacio liderado por CFK es evidente.
Duras críticas a Espert y el gobierno de Milei
El intendente no escatima en críticas hacia José Luis Espert, cuya candidatura considera "irremontable" tras las acusaciones de vínculos con el narcotráfico. Además, advierte que el gobierno de Javier Milei está "desdibujado" y "no sabe para dónde agarrar", lo que, según Gray, representa un problema para el país. Esta postura se alinea con la creciente preocupación por la gestión de la crisis económica y las políticas implementadas por el oficialismo.
¿Un nuevo espacio peronista?
En este contexto, Fernando Gray se presenta como una alternativa con su propia lista, buscando representar a un sector del electorado que no se siente identificado con los extremos y que valora la gestión y la razonabilidad. Su apuesta es construir una fuerza con base en el peronismo, pero que se distancie de las dinámicas de la grieta y ofrezca soluciones concretas a los problemas de la gente.
La pregunta que surge es si Gray logrará capitalizar el descontento existente y consolidar un nuevo espacio peronista capaz de disputar el poder en el futuro. El tiempo dirá si su propuesta logra conectar con un electorado cada vez más desencantado de la política tradicional.