Las recientes elecciones en Chubut han dejado un sabor agridulce para La Libertad Avanza (LLA). Si bien lograron imponerse, un análisis detallado revela una victoria construida sobre una base frágil, marcada por el ausentismo y una notable disminución en el caudal de votos en comparación con las elecciones generales de 2023.
Un Triunfo con Sabor a Poco
En las elecciones generales de 2023, la fuerza liderada por Javier Milei había obtenido un impresionante 38% de los votos para la categoría de diputados nacionales. Sin embargo, en esta ocasión, la candidata ganadora apenas alcanzó el 28%. Al considerar la baja participación del 70%, este porcentaje se reduce a un preocupante 19,6% del padrón electoral.
Este descenso significativo plantea interrogantes sobre la solidez del apoyo a las políticas libertarias en la provincia. ¿Se trata de un voto de castigo a las gestiones anteriores o de una desilusión temprana con el gobierno de Milei?
El Factor Trump y la Crisis Económica
Diversos analistas señalan que la campaña electoral estuvo fuertemente influenciada por factores externos, incluyendo una supuesta extorsión orquestada por Donald Trump, condicionando el “rescate” económico al resultado de la elección. Esta injerencia, sumada a la desorganización de la clase obrera y los fracasos de gobiernos anteriores, habría facilitado la victoria de LLA.
El panorama que se avecina no es alentador. La agudización de la crisis económica es un escenario probable, lo que ha motivado al macrismo y a los gobernadores a respaldar al gobierno de Milei, buscando cubrir los escándalos de corrupción y el ajuste que afecta a la clase trabajadora, jubilados, educación, salud y discapacidad.
La Derrota de Torres y el Rol del Macrismo
Otro dato relevante es la derrota de Romero, y por ende, de Torres, quien lideró la campaña. A pesar del despliegue de recursos en publicidad y la violación a la veda electoral, el oficialismo provincial sufrió un duro revés.
Es importante recordar que el macrismo ganó las elecciones intermedias de 2017, pero a fines de ese año se produjo una rebelión contra las reformas previsional y laboral, marcando el principio del fin de su gobierno. La repetición de este escenario dependerá de la lucha de clases y la capacidad de la sociedad para resistir las políticas de ajuste.
El Peronismo y la Izquierda
El peronismo quedó en segundo lugar, mientras que el FITU (Frente de Izquierda y de los Trabajadores-Unidad) logró una buena elección, considerando la polarización del escenario político. Este resultado representa un punto de apoyo para las luchas sociales que se avecinan.
En definitiva, las elecciones en Chubut dejan más preguntas que respuestas. La victoria de Milei esconde una fragilidad que deberá ser puesta a prueba en los próximos meses. La clave estará en la capacidad de la sociedad para organizarse y resistir las políticas de ajuste, así como en la habilidad de las fuerzas políticas para construir una alternativa sólida y creíble.