El Aeropuerto Internacional de Ezeiza es noticia por dos razones contrastantes: un homenaje y una controversia judicial. Por un lado, se inauguró una estatua de Diego Armando Maradona, un ícono argentino, inmortalizado en el lugar de entrada y salida del país. Por otro, Julio De Vido, ex Ministro de Planificación Federal, enfrenta nuevamente la prisión en medio de fuertes cuestionamientos sobre su proceso judicial.
Maradona: Un Legado Eterno en Ezeiza
La estatua de Maradona, realizada con tecnología de impresión 3D, captura la imagen del astro durante el Mundial de México 1986. Ubicada en la Terminal A, busca conectar a los viajeros con la pasión y el orgullo que el '10' despertó en el país. Esta iniciativa, impulsada por Eduardo Eurnekian, fundador de Aeropuertos Argentina 2000, cumple un deseo expresado por el propio Maradona: ser recordado en un lugar emblemático.
«El aeropuerto de Ezeiza es el lugar de entrada y salida de miles de argentinos y extranjeros al país, un lugar que como Maradona, conecta culturas y personas», señalan desde Aeropuertos Argentina 2000.
De Vido: Tragedia de Once y un Regreso a la Cárcel
Mientras tanto, Julio De Vido regresó a prisión para cumplir una condena de cuatro años por administración fraudulenta en relación con la tragedia ferroviaria de Once. La Corte Suprema de Justicia dejó firme la condena, desestimando los recursos presentados por su defensa. De Vido fue absuelto por el estrago culposo, las muertes de las personas.
La defensa de De Vido solicitó la prisión domiciliaria, argumentando su edad (75 años) y problemas de salud. Sin embargo, el Tribunal Oral Federal N° 4 rechazó inicialmente la suspensión de la detención, aunque aún evalúa el pedido de domiciliaria. La defensa insiste en que De Vido no está en condiciones de cumplir su condena en un penal y ha presentado nueva documentación médica.
Cuestionamientos al Proceso Judicial
El caso de De Vido, al igual que el de Cristina Fernández de Kirchner en la Causa Vialidad, ha generado controversias y acusaciones de lawfare. Sectores políticos y juristas señalan la celeridad inusual del proceso, la exposición mediática parcial y anticipada del caso, y la falta de imparcialidad judicial. Se cuestiona la proporcionalidad de las penas impuestas y la ausencia de pruebas directas que vinculen a De Vido con las muertes en la tragedia de Once, habiendo sido absuelto por este cargo.
La discusión sobre la justicia y la imparcialidad en los procesos judiciales continúa siendo un tema central en la agenda política y social argentina.