Patricia Bullrich formalizó su salida del Ministerio de Seguridad, asumiendo como senadora nacional. Su reemplazo, Alejandra Monteoliva, ya ha tomado las riendas. En su carta de renuncia, Bullrich agradeció a Javier Milei la confianza depositada en su gestión, destacando la implementación de una doctrina de seguridad y orden.
Sin embargo, este cambio de gabinete coincide con un debate profundo sobre el rol de las Fuerzas Armadas en la Argentina contemporánea. El politólogo Rodrigo Lloret señala que la designación de un militar en actividad como Ministro de Defensa por primera vez desde el retorno a la democracia marca un quiebre en el consenso democrático construido desde 1983.
El Fin del 'Nunca Más': Un Consenso en Riesgo
Según Lloret, el consenso que unió a los presidentes desde la dictadura se basaba en dos pilares: la condena a las violaciones de derechos humanos cometidas durante el Golpe de 1976 y la prevención de la reemergencia de los militares como actores políticos relevantes. Javier Milei, sin embargo, propone modificar la imagen de las Fuerzas Armadas, instando a olvidar los crímenes del pasado. Esto implica, según el analista, el fin del 'Nunca Más'.
Milei argumenta que los militares no deben pedir perdón por los desaparecidos, el robo de bebés y el plan sistemático de violaciones a los derechos humanos. Con la designación de Carlos Alberto Presti como Ministro de Defensa, se anticipa una etapa compleja en la relación entre los militares y la sociedad civil.
¿Un Nuevo Paradigma en Seguridad y Defensa?
La salida de Bullrich del Ministerio de Seguridad y la designación de un militar en Defensa plantean interrogantes sobre el futuro de las políticas de seguridad y defensa en Argentina. ¿Representa este cambio una reconfiguración del rol de las Fuerzas Armadas en la vida política y social del país? ¿Se diluirá el consenso histórico sobre los derechos humanos y la memoria?
- La designación de Presti genera controversia y debate público.
- Se cuestiona la continuidad de las políticas de memoria, verdad y justicia.
- Analistas advierten sobre los riesgos de una militarización de la política.
El tiempo dirá si estos cambios marcan un nuevo rumbo en la historia argentina o si se trata de una simple transición en el gobierno.