A un año de su última Cuenta Pública, el Presidente Gabriel Boric se prepara para resumir sus logros y enfrentar las críticas, especialmente en materia de seguridad y política exterior. El tema de la seguridad, que ha ganado prominencia a lo largo de su mandato, volverá a ser central en su discurso.
Seguridad: Prioridad Hasta el Final
En su primera Cuenta Pública, Boric ubicó la seguridad como una prioridad, impulsando medidas para combatir la delincuencia y fortalecer las fuerzas policiales. Sin embargo, iniciativas como la restricción de armas no prosperaron. Ahora, los planes Contra el Crimen Organizado y Calles Sin Violencia, impulsados por el Ministerio del Interior y Seguridad, se destacan como ejes centrales de su gestión.
Se han invertido importantes recursos en instituciones como Carabineros, la Policía de Investigaciones y el Ministerio Público. Entre 2022 y 2024, el Plan Contra el Crimen Organizado recibió más de $161 mil millones, y se proyecta una inversión total de más de $241 mil millones en cuatro años.
Política Exterior: Retiro de Agregados Militares en Israel
Recientemente, la decisión de Boric de retirar a los agregados militares de la embajada chilena en Israel generó controversia. Esta medida, tomada en protesta por la ofensiva en Gaza, fue criticada por la oposición y la Comunidad Judía, quienes la consideraron una acción ideologizada que perjudica las relaciones diplomáticas y la cooperación internacional.
La Comunidad Judía expresó su preocupación por la posible indefensión consular de los chilenos residentes en Israel y argumentó que esta decisión aísla a Chile y debilita su capacidad de incidencia en la resolución de conflictos. Los candidatos presidenciales de la oposición también se sumaron a las críticas, acusando a Boric de tener una política exterior sesgada.
¿Qué le espera a Boric en su último año?
Con su mandato llegando a su fin en marzo de 2026, Boric enfrenta el desafío de consolidar sus logros en seguridad y navegar las tensiones en política exterior. Su última Cuenta Pública será crucial para definir el legado de su gobierno y marcar la pauta para el futuro de Chile.
- Priorizar la seguridad ciudadana.
- Gestionar las relaciones internacionales con equilibrio.
- Consolidar un legado de progreso social y económico.