La cantante y productora Grimes, expareja de Elon Musk, no se ha guardado nada al criticar la plataforma X (anteriormente Twitter), propiedad del magnate. En una serie de publicaciones recientes, Grimes calificó a la red social como "un veneno" y "una prisión", sumándose a la creciente ola de críticas sobre el impacto negativo de las redes sociales en la sociedad.
"Un teatro, una pálida simulación de vida"
Grimes, cuyo nombre real es Claire Boucher, expresó su frustración con la naturaleza superficial y adictiva de X y otras plataformas similares. "He estado básicamente desconectada de las redes sociales, y al regresar aquí, es abrumadoramente, abundantemente y profundamente claro que este lugar - y todos estos lugares - son un veneno - una prisión de tonterías profundas de forma corta que nadie adjunta y que tu cerebro descartará imaginando que está aprendiendo", escribió la artista.
La cantante continuó describiendo la experiencia en las redes sociales como "un teatro. Una pálida simulación de vida". Estas declaraciones reflejan una preocupación creciente sobre la autenticidad y el bienestar mental en un mundo cada vez más dominado por la interacción digital.
No es la primera vez que Grimes critica las redes sociales
Esta no es la primera vez que Grimes expresa su descontento con las redes sociales. En abril, ya había manifestado que estar en estas plataformas se sentía como "un pueblo fantasma de depresión, amargura y fotos de mujeres hermosas haciendo cosas sext". También ha expresado su preocupación por el impacto negativo en la sociedad, calificándolo como "un fracaso moral masivo de todas las aplicaciones".
Además de sus críticas generales, Grimes ha utilizado la plataforma X para pedirle a Elon Musk que mantenga a sus hijos fuera del ojo público. Esta solicitud subraya la complejidad de su relación con Musk y su preocupación por el bienestar de sus hijos en un mundo cada vez más digitalizado.
Las críticas de Grimes se suman a un debate global sobre el papel de las redes sociales en la sociedad. A medida que las plataformas continúan evolucionando, es crucial evaluar su impacto en nuestra salud mental, nuestras relaciones y nuestra percepción de la realidad.