Tensión en la frontera: Enfrentamientos entre pasadores y fuerzas de seguridad

Tensión en la frontera: Enfrentamientos entre pasadores y fuerzas de seguridad

La frontera entre Argentina y Bolivia ha sido escenario de crecientes tensiones en los últimos días, con enfrentamientos entre pasadores de mercadería y las fuerzas de seguridad de ambos países. Los incidentes, que involucran desde piedrazos hasta resistencia activa, reflejan la compleja dinámica económica y social de la región.

Incidentes en Aguas Blancas y Bermejo

Uno de los episodios más recientes ocurrió en el Paso Internacional Puerto Chalanas, donde pasadores (también conocidos como "bagayeros") se enfrentaron a la policía boliviana que intentaba decomisar mercadería, incluyendo ropa usada. Según fuentes policiales, los comerciantes planeaban ingresar ilegalmente la mercadería a la localidad salteña de Aguas Blancas. El enfrentamiento dejó varios efectivos heridos y daños a un vehículo militar.

En Bermejo, ciudad boliviana limítrofe con Aguas Blancas, trabajadores de frontera impidieron el decomiso de mercadería por parte de la Naval Boliviana, escalando aún más la violencia en la zona. Estos incidentes, aunque ocurridos en suelo boliviano, impactan directamente en Argentina debido a la fluidez del intercambio fronterizo.

El rol del contrabando y la economía regional

El contrabando, tanto de sustancias ilegales como de productos de primera necesidad, es un factor clave en estos conflictos. El llamado "contrabando a la inversa", que implica la salida ilegal de productos argentinos debido a la depreciación de la moneda, afecta el abastecimiento interno boliviano y los precios de la canasta básica.

Medidas y perspectivas

Adrián Zigarán, Interventor de Aguas Blancas, ha denunciado la falta de acción de la justicia federal y fiscalías en la zona, al tiempo que destaca la importancia del Plan Güemes en la lucha contra el narcotráfico y el control fronterizo. Sin embargo, reconoce que el contrabando es una fuente de ingresos para miles de personas en la región, lo que complica la implementación de medidas más restrictivas.

La situación se ha agravado tras los decretos supremos firmados por el presidente boliviano Luis Arce, que instruyen a las fuerzas armadas a intensificar el control del contrabando. La escalada de violencia en la frontera exige una respuesta coordinada y soluciones integrales que aborden las causas económicas y sociales subyacentes.