Incendio en Ezeiza: Un desastre anunciado
Un voraz incendio seguido de una explosión sacudió el Polígono Industrial Spegazzini en Ezeiza, dejando tras de sí un paisaje de devastación. Las llamas, visibles incluso desde aviones, consumieron la empresa Logischem S.A., desatando una investigación para determinar las causas del siniestro y las responsabilidades correspondientes.
Mientras la fiscalía de Florencia Belloc recaba información crucial, se espera la declaración de un testigo clave que podría arrojar luz sobre el origen del fuego. La investigación se centra en determinar si el incendio fue intencional o accidental, y si las medidas de seguridad implementadas por Logischem eran adecuadas para el manejo de sustancias peligrosas.
Un arsenal de productos peligrosos
Según el presidente de Logischem, Pablo Celabe, la empresa almacenaba una variedad de sustancias altamente inflamables y peligrosas. Entre ellas se encontraban:
- Gas butano en garrafas para mecheros portátiles.
- Hidrosulfito de sodio y aluminio metácilo, oxidantes que reaccionan con el agua liberando gases inflamables.
- Bromuro de metilo, un compuesto altamente tóxico.
La presencia de estas sustancias, sumada a la posible negligencia en su almacenamiento, convirtió el depósito en una bomba de tiempo, según testimonios de exempleados.
¿Una mezcla fatal?
Trabajadores del lugar señalan que un producto que “largaba mucho vapor” podría haber sido almacenado junto al peróxido, sustancias incompatibles que, al reaccionar, habrían desencadenado el incendio. Esta hipótesis cobra fuerza al conocerse que un ex empleado describió la situación como una "bomba de tiempo", con conocimiento profundo del funcionamiento de Logischem.
El incendio se propagó rápidamente, afectando a empresas vecinas como Iron Mountain, Larroca Minera, Almacén de Frío, Aditivos Alimentarios y Sinteplast. Afortunadamente, a pesar del caos y el susto, todos los trabajadores lograron evacuar a tiempo, evitando víctimas fatales.
Las autoridades continúan investigando las causas del siniestro y evalúan los daños ambientales y materiales ocasionados por la explosión. El caso de Logischem S.A. pone de manifiesto la importancia de implementar rigurosas medidas de seguridad en el manejo de sustancias peligrosas para evitar tragedias como la ocurrida en Ezeiza.